cejas

A veces no somos del todo conscientes de cómo la forma de nuestras cejas le da expresión a nuestra cara. Cuando nos asombramos, enojamos, asustamos, entristecemos o queremos seducir, las cejas son las primeras en indicar lo que sentimos, ya que el poder de expresión qué tienen en nuestro rostro revela gran parte de nuestro interior.

Esto que parece tan evidente es aveces descuidado por nosotras mismas. Es tiempo de enmendar el error y darle a nuestras cejas el protagonismo que ellas merecen en nuestro rostro.

cejas

Por supuesto, como todos los estilos aún los que tienen que ver con la estructura del cuerpo van variando con las modas. Durante las décadas del 20 y el 30 la tendencia era depilarlas por completo, dibujándolas después con un solo trazo de lápiz, durante los años 80 se impuso el estilo Madonna de cejas espesas y peinadas hacia arriba, en los 90 la tendencia las angostó y ahora se vienen utilizando un estilo medio, que intenta más bien ser natural sin por eso buscar parecer mujeres de las cavernas.

De todos modos hay que tener en cuenta que cuando las cejas son excesivamente finas, o poco abundantes en su cantidad de pelo, eso puede envejecernos, porque inconscientemente tendemos a asociar la escasez de pelo con la cantidad de años. Para solucionar esto tenemos, una vez más, a nuestro aliado »el maquillaje».

La corrección de cejas a través de la depilación.

cejas

Las cejas es otra parte de nuestro cuerpo que no tiene porqué ser perfecta por naturaleza, pero poseen la gran ventaja de que podamos darle forma a nuestro antojo. La naturaleza puede habernos dado cejas muy unidas o separadas, o tal vez anchas en exceso, pero todas estas características pueden corregirse sin complicaciones al ser depiladas.

Para la depilación existen varios métodos, es algo qué podemos hacer con las clásicas pinzas, con cera, con hilo, etcétera. Pero, cuando de cejas se trata, no recomendamos nunca apelar a la depilación o por el contrario a la pigmentación definitiva, ya que como dijimos, las tendencias cambian y lo que hoy aparece como bonito y deseable, dentro de un par de años puede ser por completo inviable en el mundo de la moda.

Pero hay algunos detalles a tener en cuenta si se trata de dar forma a nuestras cejas para con ellas entonar el rostro en general:

  • Si las cejas están muy cerca de los ojos la mirada luce sombría, por lo que conviene depilar el espacio que separa a dichas estructuras para proporcionar luminosidad.
  • Si son demasiado rectas la expresión se endurece, en estos casos al retirar la vellosidad debe procurarse crear ligero arco a la mitad de la ceja.
  • Si son demasiado arqueadas nos hacen aparecer cómo permanentemente enojadas o despectivas, por lo que se sugiere evitar marcar el arco al depilarlas y corregir con maquillaje, así, la expresión se atenúa y dulcifica.
  • Unas cejas más cortas de lo necesario, por ejemplo, harán que los ojos parezcan más chicos.

Es recomendable depilarse después de la ducha, ya que los poros se abren y el vello se suaviza.

Es importante retirar cada vellosidad en la dirección en la que crece, para que el vello salga de raíz.

Posteriormente a la depilación se recomienda aplicar crema humectante y dar suaves golpecitos con la yema de los dedos.

Cepillar las cejas de un lado al otro, y de arriba a abajo, ayudará a darle más volumen.

Como tener un acabado de cejas perfectas

cejas

Si no bastara con la depilación para dar a las cejas la forma y la expresión que buscamos, maquillar las cejas es lo ideal para darle buen acabado al maquillaje. Para esto necesitamos:

  • Un gel especial para esta área.
  • Un lápiz para cejas del color de nuestro pelo.
  • Sombras en polvo especiales para cejas.
  • Un cepillo pequeño.

Para empezar, es necesario fijarse es la cantidad de vellos que tienen las cejas; en caso de que estén muy pobladas basta con peinarlas y aplicarles un poco de gel. De lo contrario, conviene rellenar los espacios donde no hay velocidad con el lápiz para cejas o una sombra para cejas en polvo, evitando marcarlas demasiado; recuerde que debe lucir lo más natural posible.

Esto lo haremos de la siguiente manera: Marcaremos con el lápiz de punta fina pequeñas rayitas en la misma dirección que los vellos reales, así parecerán pelitos verdaderos y su efecto será el más natural.

Las cejas pueden llegar a ser la gran diferencia entre unos ojos llamativos y unos ojos apagados; por esto se debe maquillar apropiadamente.

Cuando nos maquillamos, aplicaremos un poco de polvo volátil sobre las cejas, las colorearemos suavemente con un lápiz delineador y agregaremos sombras amarronadas para darles un efecto natural; con un toquecito de spray fijador para el cabello aplicado sobre un pequeño cepillito para cejas (nunca directamente sobre el rostro) peinamos suavemente las cejas y así evitaremos que se desarreglen en el resto de la jornada.

Si bien la elección de las cejas depende te lo que estile, de nuestro gusto y de la forma de nuestros ojos, en términos generales se admite que para unas cejas perfectas se deben tomar medidas a los lados de la nariz en forma vertical, hacia arriba con el lápiz, y luego haciendo un ángulo que termine al finalizar el ojo.

Lo que nunca debemos hacer con nuestras cejas

Nunca hagas las siguientes cosas:

Dibujarlas con un solo trazo de lápiz: Es totalmente antinatural y dará a nuestro rostro la apariencia de una muñeca diabólica.

Nunca debemos escoger colores diametralmente opuestos al color de nuestro cabello, tenemos que tratar de maquillarlas con los colores más semejantes a los de nuestro pelo.

En caso de tener el cabello platinado o Rubio muy claro puedes usar en las cejas un tono marrón claro. Pero no es conveniente decolorar las cejas al mismo tono de tu cabello rubio ya que al ser tan claras a cierta distancia el rostro se verá como si no tuviera cejas.

Sólo en el caso de las rubias claras se acepta que las cejas sean un tono o dos tonos más oscuro que su cabello. Para las castañas o rubias oscuras se debe tratar de que las cejas sean parecidas al tono de cabello.

Articulo relacionado: Maquillaje: 5 claves básicas para empezar

por Lourdes