Las articulaciones, las partes del organismo que se encargan de mantener los músculos y los huesos del cuerpo unidos, exigen atención y cuidado para que no se deterioren. El inevitable paso del tiempo es una de las causas de este deterioro, pero también lo es la falta de ejercicio. En todo caso, una vez más, una dieta adecuada puede prevenir los problemas de las articulaciones.
Las articulaciones, que mantienen unidos los músculos y los huesos, funcionan mediante la acción conjunta de la sinovia, un líquido denso y viscoso que lubrica y alimentan los cartílagos. Estos están formados por un tejido que carece de vasos y nervios, cuya función es evitar el roce entre los huesos, ya que actúa como un »colchón» protector.
El paso del tiempo y la falta de ejercicio hacen que ese colchón se deteriore y acabe perdiendo su eficacia o desapareciendo. Eso tiene como resultado que los huesos entren en contacto, y es la causa por la que muchas veces se puede oír su chasquido un crujido al realizar un movimiento… Pero el ruido no es lo malo; lo peor es la inflamación y el dolor que produce.
¿Qué comer y que beber si se tiene problemas en las articulaciones?
Alimentos
Ricos en ácidos grasos esenciales, para reducir los efectos de los compuestos inflamatorios que libera el organismo: salmón, jurel, sardina, trucha y aceite de pescado.
Ricos en antioxidantes cómo vitaminas c, A y E, qué evita el envejecimiento de los tejidos: zanahoria, albaricoque, mango, melón, pimiento rojo, col, kiwi, naranja, col de bruselas, aguacate, nueces, pipas de girasol y aceite de oliva virgen.
Ricos en selenio: Marisco, algas marinas, nueces de brasil, brócoli, apio, cebolla o ajo.
Bebidas e infusiones que puedes tomar
Beber cada día gran cantidad de agua, para mantener lubricada en las articulaciones.
Tomar regularmente infusiones de ulmaria y sauces blanco para mejorar el estado de las articulaciones.
Como suplemento fitoterapeutico se pueden tomar cápsulas de harpadol y humagon si existe cualquier tipo de molestia articular y dolor de espalda.
Qué es reducir o evitar
Suprimir el tabaco, ya que provoca el aumento de radicales libres.
Eliminar alimentos con oxidantes, como el alcohol o las comidas rápidas precocinadas.
Actividades cotidianas
Evitar, ante todo, el sobrepeso.
Realizar ejercicio moderado; sobre todo, caminar.
Ponerse en manos de un masajista o quiropráctico, porque los masajes son una excelente alternativa.
Evitar actividades que empeoren la adolescencia: por ejemplo, en el caso del llamado codo de tenista, además de no jugar al tenis, abandonar tareas repetitivas como pintar o lijar.
Iniciar cualquier ejercicio físico con una fase de calentamiento.
Esta información es meramente informativa. Consulte primero a su médico.